Alteraciones Digestivas: Alteraciones hepáticas (esteatosis hepática – hepatitis alcohólica – cirrosis alcohólica), pancreatitis (aguda y crónica), alteraciones gástricas (gastritis y ulceras pépticas), malabsorción intestinal, síndrome de Mallory – Weiss. Existe una intensa asociación entre el consumo de alcohol y la cirrosis – para varones fallecidos entre 35 y 69 años el riesgo de muerte por cirrosis era de 5/100.000 en los abstemios y de 41/100.000 en los bebedores de 4 o más bebidas al día – (Thun y cols., 1997). No sólo los niveles de consumo sostenido de alcohol influyen en la aparición de una cirrosis alcohólica ya que sólo un 20% de las personas con dependencia al alcohol la desarrollan, existen diversos factores genéticos que aumentarían el riesgo, de hecho la concordancia en gemelos monocigóticos para la cirrosis alcohólica es del 15% frente al 5% de concordancia en gemelos heterocigóticos. Determinados polimorfismos en las enzimas hepáticas metabolizadoras del alcohol y en los antígenos HLA determinan un mayor riesgo de presentar una cirrosis (Lumeng y Crab, 1994). La presencia del VHC (Schiff y Ozden, 2003), el consumo alcoholes alifáticos, presentes en destilados caseros, o ser mujer implican un mayor riesgo para el desarrollo de cirrosis alcohólica (Mann, Smart y Govoni, 2003).
Alteraciones Musculoesqueléticas: Gota, osteoporosis (el consumo de alcohol se asocia al riesgo de osteoporosis y fracturas, en hombres y mujeres, de forma dosis dependiente (Cosman, 2005), miopatía.
Alteraciones Endocrinas: Hipogonadismo masculino y alteraciones en el ciclo hormonal reproductivo femenino produciendo infertilidad (Emanuele y Emanuele, 2001; Emanuele, Wezeman y Emanuelle, 2002), pseudo Cushing y síndrome metabólico (Fan y cols., 2006).
Alteraciones Cardiovasculares: Arritmias y muerte súbita. La fibrilación atrial es el tipo de arritmia que se asocia con más frecuencia al consumo abusivo, crónico o agudo, de alcohol. De un 15-30% de los casos de fibrilación atrial se relacionan con el consumo de alcohol (Emberson y cols., 2005). Hipertensión arterial (entre el 5% y el 30% de los casos de hipertensión pueden estar en relación con un consumo de riesgo de alcohol) el alcohol aumenta la presión arterial de una forma dosis-dependiente (Klatsky, 2004), Accidente Cerebro Vascular (ACV) el alcohol aumenta de riesgo de padecer un ACV isquémico o hemorrágico de forma dosis dependiente (Corrao y cols., 1999). Consumos episódicos de grandes cantidades de alcohol son un importante factor de riesgo para padecer un ACV en la adolescencia o inicio de la vida adulta. Otra consecuencia cardiovascular importante es la cardiomiopatía.
Alteraciones Metabólicas: Hipoglucemia, cetoacidosis, hiperlipidemia. Con respecto al Síndrome Metabólico (presentar tres o más de las siguientes condiciones: obesidad abdominal, hipertensión arterial, hipertrigliceridemia, bajos niveles de colesterol HDL o hiperglucemia) hay que indicar que el consumo moderado de alcohol parece tener un discreto efecto protector a la hora de padecerlo (NIAAA, 2003).
Alteraciones Hematológicas: Anemia con macrocitosis, ferropenia, neutropenia, trombocitopenia.
Alteraciones Neurológicas: Crisis convulsivas, neuropatía periférica (que afecta principalmente a las piernas), alteraciones cerebelosas, ambliopía y encefalopatía alcohólica.
Alteraciones Cutáneas: Psoriasis, eczema.
Cánceres: El alcohol incrementa de forma importante el riesgo de padecer cánceres en la boca, esófago, laringe, hígado y mama (en mujeres; sobre todo si tienen antecedentes familiares de neoplasia de mama y/o tratamientos hormonales sustitutorios) y, en menor medida, aumenta también el riesgo de padecer cánceres de 34 estómago, colon y recto (Bagnardi y cols., 2001). El riesgo anual de padecer este tipo de tumores para varones fallecidos entre 35 y 69 años se sitúa en 14/100.000 para los abstemios y en 50/100.000 para los consumidores de más de 40 gramos de alcohol al día (Thun y cols., 1997).
- Marcadores biológicos de consumo excesivo de alcohol:
- Pueden ser utilizados para la detección de pacientes con problemas relacionados con el consumo perjudicial de alcohol. Facilitan el abordaje de los pacientes que niegan consumo.
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Intervención motivacional orientada hacia la reducción del consumo o hacia la abstención continuada de bebidas alcohólicas.
- Permiten determinar la gravedad física del consumo y monitorizar la evolución
b. Volumen corpuscular medio (VCM):
- La elevación de este parámetro esta relacionado con alteraciones que el alcohol produciría de forma directa en los eritroblastos ( déficit de vitamina B o ácido fólico,enfermedades hepáticas, tabaquismo y ciertos fármacos)
c. GAMMA-GLUTAMIL-TRANSPEPTIDASA (GGT)
- Es un buen indicador del aumento de la actividad enzimática microsomal inducida por el alcohol. pueden aumentar sus niveles en sangre como son: enfermedades hepatobiliares, procesos pancreáticos, insuficiencia cardiaca, diabetes,
- obesidad, tabaquismo, ciertos fármacos como las benzodiacepinas o los anticoncepti
- vos
d. Transferrina Deficiente en Carbohidratos (CDT)
- La ingesta crónica de alcohol induce una disminución de radicales de ácido siálico unidos a la transferrina,provocando que se altere en enfermedades hepáticas avanzadas, embarazo, problemas congénitos y alteraciones genéticas.
Los marcadores biológicos de consumo excesivo de alcohol, especialmente la combinación de la CDT y la GGT, pueden ser de gran utilidad para la detección del consumo, sobretodo cuando van asociados a cuestionarios de detección del consumo de riesgo.
Marcadores biológicos relacionados con el consumo de alcohol (En investigación)